Altruismo y compasión

Hablar hoy en día de altruismo, empatía o compasión puede producir incredulidad, asombro o hilaridad. Algunas personas pueden ver estas palabras asociadas a concepciones morales que poco o nada tienen que ver con el día a día de las organizaciones.

Pero lo cierto es que actitudes como confianza, cooperación, respeto, altruismo, sinceridad, aprecio, solidaridad, compasión o empatía son las que han hecho florecer y han fortalecido las relaciones humanas a lo largo de la historia. Este tipo de actitudes permiten que las personas alcancen el suficiente grado de cohesión como para plantearse alcanzar objetivos comunes.

La historia suele hablar de tragedias, batallas, albores y ocasos de imperios, y parece como si toda nuestra evolución se hubiera basado en la lucha y la competencia, pero hay un sutil hilo conductor de nuestra evolución como civilización que no suele salir en los libros y que habla de cooperación y empatía.

Existen sobradas evidencias de los buenos resultados que se obtienen cuando se organizan jornadas de “team building” para la mejora de la comunicación y la cohesión de los equipos de trabajo. La compasión es un paso más allá, que aumenta los lazos y fortalece las relaciones. No revela debilidad, sino muy al contrario inteligencia y fuerza emocional.

Desterremos pues las connotaciones equivocadas que relacionan estas actitudes con la pena, la lástima o la debilidad, y aprendamos a usarlas en nuestras relaciones personales para alcanzar nuestros objetivos comunes.

Por DAVID HERVÁS SANZ